DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS DE EL REDESPERTAR ESTUDIANTIL 


1 
El redespertar estudiantil es una organización política, democrática y transversal.
Es una organización por cuanto no es una mera yuxtaposición de individuos, es un grupo que comparte ideas, planteamientos, fines y objetivos, y que adopta su estrategia y táctica política con independencia de toda organización externa a ella. 
Es una organización democrática pues basa sus decisiones en la voluntad general de sus integrantes. 
Es una organización transversal ya que si bien reconoce un ordenamiento entre sus filas, -pues una organización sin orden no es tal- este no implica una división jerárquica entre sus integrantes. Todos los miembros de “El redespertar estudiantil” tienen el mismo derecho de dirigir su organización. 

2
 Es una organización que se plantea en contra de cualquier política que sustente y reproduzca una forma de vida y de sociedad que mercantilice o trate como cosa al ser humano.  
Así mismo solidarizamos con las luchas e intereses de los pueblos originarios de Chile que sufren directamente la centenaria represión estatal. 

3
  Nuestra visión de la universidad comparte los planteamientos de nuestro maestro  Manuel de Rivacoba. La universidad más que un centro de aprendizaje para sacar títulos, es una comunidad del saber, es decir, una sociedad que se mantiene unida por el amor al saber, en la amistad y la fraternidad entre sus integrantes. Planteamos que lo más importante en la universidad somos los estudiantes, ya que los demás integrantes (mal llamados estamentos) existen en pos de nosotros. 
Propugnamos la triestamentalidad democrática e igualitaria. 
Proponemos como objetivos el bienestar y desarrollo de todos y cada uno de los integrantes de la comunidad universitaria, ya sea de estudiantes, trabajadores y profesores.
Proponemos y estamos decididos a  participar en el mejoramiento de la malla curricular y del régimen de estudios. 
La educación de calidad y la excelencia académica son objetivos irrenunciables de toda comunidad educacional.
Defenderemos los derechos de estudiantes y trabajadores de esta universidad como consecuencia del sincero cariño que sentimos por ella. Por ello mismo, no nos quedaremos callados jamás ante las injusticias y arbitrariedades de que sean víctimas.
Proponemos medidas concretas que permitan hacer de la universidad un espacio para todos, en especial para los jóvenes postergados y marginados, medidas que están encaminadas a terminar con la lógica mercantil de la educación.
No nos conformamos meramente con soluciones a nivel de escuela, sino aspiramos a transformar el sistema educacional de Chile, haciendo presente y partícipe a la escuela y universidad en instancias superiores que tiendan a este fin. 

4
En cuanto a la organización será contradictor pero también alternativa a la lógica de burocracia y pretendida representación, inserta en la organización estudiantil actual. 
Planteamos la democracia directa como sistema de adopción de decisiones colectivas, y en especial en el movimiento estudiantil, en el cual la pluralidad de sensibilidades no se expresa de forma fiel en las directivas pretendidamente representativas. En pos de la construcción de una sociedad justa y democrática, proponemos como medio de acción política la acción directa de las personas asociadas en comunidad como la única forma de expresión democrática de los estudiantes y trabajadores. 

5
Por tanto basará su accionar político en la crítica y transformación del modelo educacional actual, a través de la conquista de los espacios de poder que nos permitan realizar las transformaciones necesarias que van en pos de los más afectados por las consecuencias de la mercantilización a ultranza de la educación.

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Así mismo, se propone la construcción de un movimiento estudiantil para y en función de un movimiento popular, es decir, una organización que éste al servicio de los trabajadores y el pueblo de Chile. No negamos el valor que tienen las luchas reivindicatorias de carácter gremial o sectorial, siempre que estén inmersas y coordinadas en un movimiento político unificado con el resto de las demandas y exigencias de los oprimidos y excluidos.

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Luchamos ante todo por una educación digna y gratuita para todos y, por tanto, también por la transformación valórico-cultural de todo lo que es posible enseñar, con el fin de que no sea más la educación un instrumento de la clase dominante que reproduzca la división clasista de la sociedad. Para ello se hace perentorio unir los esfuerzos y voluntades de todos para construir una organización del poder social verdaderamente democrática. 

“…por una educación digna y gratuita para el pueblo…con el paso firme y el lenguaje claro...”